Cuando uno piensa en el matrimonio, usualmente no espera un juego de roles como parte de su vida cotidiana. Sin embargo, últimamente, mi esposo ha estado jugando un juego de rol muy misterioso que ha añadido una nueva dimensión al nuestro.
Hace algunos días, mientras nos encontrábamos en la sala, él se acercó con una sonrisa en su rostro y me dijo que quería jugar un "juego". Aunque suena inocente, inmediatamente me sentí intrigada y cautelosa al mismo tiempo. ¿Qué clase de juego? ¿Sería una especie de sorpresa divertida o algo más serio?
Mi esposo es una persona bastante reservada y misteriosa en cuanto a sus actividades personales, siempre ha sido difícil para mí saber qué hacer o qué esperar. Por eso, este nuevo giro me hizo preguntarme, ¿qué estaba planeando? Pero también, me hice una promesa de confiar en él y ver adónde llevaba este juego.
El primer paso del juego consistió en la creación de un personaje. Él se encargó de crear su personaje en un papel. Le pidió a una amiga, también jugadora de rol, que le ayudara a darle vida. Mientras que yo, aunque emocionada por la perspectiva de un juego de rol, aún estaba desconcertada por el hecho de que estuviera jugando uno solo. Esto generó más intriga en mí sobre lo que podría estar ocurriendo.
Algunas noches después, mi esposo finalmente decidió mostrarme más detalles sobre su juego. Comenzó a hablar acerca de los diversos escenarios que planeaba explorar con su personaje. Me explicó acerca de la aventura, las batallas, y las habilidades únicas de su personaje. Fue entonces cuando me di cuenta de la magnitud de su empeño, ya que pasaba horas cada noche trabajando en su juego.
La idea de un juego de rol en solitario es un poco contraintuitiva para mí. Después de todo, normalmente, estos juegos se basan en la interacción entre personas. Pero a medida que comprendía más sobre el concepto, empezaba a apreciar mejor lo valioso que puede ser un juego de rol personal. En lugar de simplemente seguir instrucciones o interactuar con otros personajes, se involucra directamente en el desarrollo de su propio personaje y sus historias, lo cual es una experiencia única e íntima.
Pero, por supuesto, no todos los aspectos de este juego eran agradables. Al igual que en cualquier relación, la comunicación es clave. Hubo momentos en los que me sentí un poco excluida o incluso abandonada, porque parecía que mi esposo había creado un mundo dentro de su mente que solo él podía experimentar. Y aunque intenté entenderlo y apoyarlo, también necesité tiempo para adaptarme a esta nueva dinámica.
Finalmente, llegó un día en que mi esposo finalmente decidió revelar un poco más sobre su juego. Me mostró partes de su juego que había estado trabajando durante semanas. Fue entonces cuando descubrí la razón de toda su dedicación y esfuerzo. ¡Él estaba escribiendo una novela! Un libro de aventuras protagonizado por su personaje de rol. Esta revelación me sorprendió y me emocionó, ya que nunca antes había tenido la oportunidad de ver cómo funcionaba la mente creativa de mi esposo.
Desde ese momento en adelante, nuestra relación tomó un giro inesperado pero interesante. El juego de rol se convirtió en una parte integral de nuestras vidas. Yo comencé a involucrarme más, aprendiendo acerca de los elementos del juego y a menudo ayudándolo con su escritura. Nos convertimos en cómplices en un viaje literario y de aventura único, en el que ambos podíamos contribuir y aprender. A pesar de las dificultades iniciales, este juego de rol terminó siendo una experiencia enriquecedora y divertida que fortaleció nuestro vínculo.
En resumen, aunque inicialmente parecía extraño y un poco misterioso, el juego de rol de mi esposo resultó ser una bendición disfrazada. Hizo que nuestras vidas fueran más emocionantes y dinámicas, permitiéndonos explorar juntos nuevas formas de arte y aventura. Además, este proceso nos dio una nueva perspectiva sobre la importancia de la comunicación y la confianza en nuestra relación, lo cual es invaluable para cualquier pareja. Finalmente, este juego fue una puerta abierta a una aventura que ninguno de nosotros hubiera imaginado.
Así que la próxima vez que tu pareja se siente a pasar tiempo solo en su habitación, recuerda que podría estar trabajando en un nuevo proyecto creativo que podría ser una sorpresa maravillosa, tal como sucedió conmigo y mi esposo.
